Como saber si mi higado esta mal

Cómo mantener sano el hígado
El hígado es un órgano del tamaño de un balón de fútbol. Se encuentra justo debajo de la caja torácica, en el lado derecho del abdomen. El hígado es esencial para digerir los alimentos y eliminar las sustancias tóxicas del organismo.
Con el tiempo, las enfermedades que dañan el hígado pueden producir cicatrices (cirrosis), que a su vez pueden provocar insuficiencia hepática, una enfermedad potencialmente mortal. Sin embargo, el tratamiento precoz puede dar tiempo al hígado para curarse.Productos y ServiciosMostrar más productos de Mayo Clinic
Cuándo acudir al médicoPida cita con su médico si tiene algún signo o síntoma persistente que le preocupe. Busque atención médica inmediata si tiene dolor abdominal tan intenso que no puede permanecer quieto.Más información
InfecciónLos parásitos y los virus pueden infectar el hígado, provocando una inflamación que reduce la función hepática. Los virus que causan daños hepáticos pueden propagarse a través de la sangre o el semen, el agua o los alimentos contaminados o el contacto estrecho con una persona infectada. Los tipos más comunes de infección hepática son los virus de la hepatitis, entre los que se incluyen:
Alimentos buenos para el hígado
La ictericia es una coloración amarillenta de la piel y los ojos. Se produce cuando hay niveles muy altos de pigmento biliar (bilirrubina) en la sangre. La orina suele ser oscura porque la bilirrubina se expulsa del organismo a través de los riñones. Los niveles altos de bilirrubina pueden estar relacionados con inflamaciones, otros problemas de las células hepáticas u obstrucción de los conductos biliares. A veces, la ictericia se debe a la descomposición de un gran número de glóbulos rojos. Esto puede ocurrir en recién nacidos. La ictericia suele ser el primer signo de enfermedad hepática. A veces es el único signo.
Colestasis significa cualquier afección en la que el flujo biliar se ralentiza o se detiene. Cole hace referencia a la bilis y estasis significa que no se mueve. El flujo biliar puede estar bloqueado dentro del hígado, fuera del hígado o en ambos lugares. Los síntomas pueden ser:
El agrandamiento del hígado suele ser un signo de enfermedad hepática. Pero a menudo no hay síntomas relacionados con un hígado ligeramente agrandado (hepatomegalia). Los síntomas de un hígado muy agrandado incluyen molestias en el vientre o "sensación de saciedad". A medida que la enfermedad hepática empeora y se desarrolla la cirrosis, el hígado se encoge debido a la cicatrización.
Enfermedad hepática terminal
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Al diagnosticar una enfermedad hepática, el médico observa los síntomas del paciente y realiza una exploración física. Además, el médico puede solicitar una biopsia hepática, pruebas de la función hepática, una ecografía, una tomografía computarizada (TC) y/o una resonancia magnética (RM).
La ictericia es una coloración amarillenta de la piel y el blanco de los ojos debida a niveles anormalmente altos de bilirrubina (pigmento biliar) en el torrente sanguíneo. La orina suele ser oscura debido a la bilirrubina excretada por los riñones. Los niveles elevados de bilirrubina pueden atribuirse a una inflamación u otras anomalías de las células hepáticas, o a la obstrucción de los conductos biliares. A veces, la ictericia está causada por la descomposición de un gran número de glóbulos rojos, lo que puede ocurrir en recién nacidos. La ictericia suele ser el primer signo, y a veces el único, de enfermedad hepática.
Hígado grande
Sin embargo, algunas afecciones hepáticas pueden dejar daños permanentes, en cuyo caso un diagnóstico precoz y un tratamiento rápido pueden suponer la diferencia entre una enfermedad incómoda (pero tratable) y una emergencia potencialmente mortal.
Como ocurre con muchas enfermedades progresivas, es posible que no note ningún signo o síntoma de enfermedad hepática en las primeras fases. Pero, a medida que la función hepática comienza a declinar, puede empezar a notar algunos cambios físicos en determinadas zonas de su cuerpo.
A medida que la función hepática disminuye y los desechos ya no pueden eliminarse del organismo con eficacia, el pigmento biliar llamado bilirrubina puede acumularse en el torrente sanguíneo. A su vez, la piel y los ojos pueden adquirir un color amarillento, la orina parecerá más oscura y las heces más claras.
Si sospecha que tiene un problema hepático, consulte inmediatamente a su médico. Hay varias pruebas que pueden revelar de forma rápida e indolora el alcance del daño hepático y que determinarán el tratamiento adecuado.